• Mecanismo de acción. El litio actúa a dos niveles, como agente normalizador sobre los sistemas funcionales hiperactivos en el SNC, impidiendo las fluctuaciones excesivas del humor y a nivel intracelular, alterando la función de otros cationes mono y divalentes y múltiples procesos del funcionalismo intraneural.
    • Su empleo en terapéutica está basado en su acción en los transtornos bipolares, ejerciendo un doble efecto como antidepresivo y como antimaníaco. Como antidepresivo , interviene potenciando la acción serotoninérgica, aumentando los niveles de GABA y disminuyendo la sensibilidad de los receptores dopaminérgicos y beta-adrenérgicos.
    • La acción antimaníaca la ejerce mediante distintas acciones: aumenta la actiidad de la MAO-B, disminuye la transmisión catecolaminérgica, modificando la transmisión colinérgica, inhibe las hormonas tiroideas y prolonga la despolarización postsináptiva.
    • En individuos con trastorno bipolar, el litio es capaz de contrarrestar la sintomatología maníaca y prevenir o disminuir la intensidad de los episodios de la enfermedad maníaco-depresiva. El litio, a concentraciones terapéuticas, carece efectos psicotrópicos en sujetos normales.
  • Efecto farmacológico. Antipsicótico.
  • Indicaciones terapéuticas.
    • Transtorno bipolar. Prevención y tratamiento de los episodios de manía; prevención de la depresión en pacientes con transtorno bipolar. El tratamiento de mantenimiento previene o disminuye la intensidad de futuros episodios de manía.
    • Depresión. Depresión unipolar recurrente y depresión endógena resistente al tratamiento convencional.
    • Neutropenia. Inducida por quimioterapia en niños y en pacientes con SIDA que toman zidovudina.
  • Contraindicaciones.
    • Alergia al medicamento.
    • Insuficiencia renal o cardiovascular grave.
    • Pacientes muy debilitados , con deshidratación grave o con deplección de sodio.
  • Interacción con otros medicamentos o alimentos. Existen datos clínicos de interacciones con los siguientes fármacos:
    • Acetazolina: aumento de la eliminación del litio, con inhibición de su efecto. No se ha establecido con exactitud el mecanismo.
    • Aciclovir: potenciación de la toxicidad por litio, por posible inhibición de su eliminación renal.
    • Alcohol etílico: potenciación de toxicidad, con alteraciones de la capacidad psicomotriz, por posible adición de sus efectos depresores sobre el sistema nervioso central.
    • Antidepresivos ISRS: aumento de los niveles plasmáticos de litio, con posibles potenciación de su toxicidad. N o se ha establecido el mecanismo.
    • Antidepresivos tricíclicos: hay casos registrados de neurotoxicidad, síndrome serotoninérgico y síndrome neuroléptico maligno. Evita la asociación. Si no es posible, puede ser preferible emplear un antidepresivo del tipo de los ISRS.
    • AINE: aumento de los niveles plasmáticos de litio con posible potenciación de su acción y/o toxicidad, por disminución de su aclaramiento renal. Para tratar la fiebre o el dolor leve o moderado se aconseja paracetamol.
    • Antipsicótico: muy rara vez se ha observado potenciación de la neurotoxicidad, por posible adición de sus efectos neurotóxicos.
    • Bicarbonato sodio: inhibición del efecto del litio, por posible aumento de excreción renal.
    • Bloqueantes neuromusculares: casos aislados de prolongación del bloqueo neuromuscular en pacientes tratados con litio.
    • Bromuros: potenciación de la toxicidad por bromuros, por posible inerferencia competitiva a nivel de la excreción renal.
    • Cafeína: disminución de los niveles plamáticos de litio por aumento de su excreción renal. Al retirar la cafeína se observarón elevaciones de las concentraciones plasmáticas de litio de hasta un 24%.
    • Carbamazepina: poteciación de toxicidad, por posible acción sinérgica sobre el metabolismo neuronal del sodio.
    • Clorpromazina: disminución de los niveles plamáticos de clorpromazina, con posible inhibición de su efecto, por inducción de su metabolización gastrointestinal. Adicionalmente la excreción renal de litio puede ser aumentada por clopromazina.
    • Diuréticos: se han descrito algunos casos de intoxicación por litio en pacientes tratados con diuréticos cuando el paciente tenía otros factores de riesgo como dietas hiposódicas, insuficiencia renal o cardíaca, cirrosis o diabetes. Se recomienda evitar la asociación, y si no fuera posible, controlar periódicamente los niveles de litio, ajustando la dosis si fuera necesario. Es importante asegurar un aporte adecuado de sodio.
    • Fenitoína: hay algún estudio en el que se ha registrado potenciación de la toxicidad de litio. No se ha establecido el mecanismo.
    • IECA y ARA: aumento de las concentraciones de litio con potenciación de su toxicidad , por disminución de su eliminación renal. Vigilar las concentraciones de litio, especialmente en pacientes con insuficiencia renal, insuficiencia cardíaca o con deplección de volumen.
    • IMAO: potenciación de la toxicidad, con importantes alteraciones del sistema nervioso central. No se ha establecido el mecanismo.
    • Ioduro potásico: potenciación del efecto de litio con aparición de hipotiroidismo , por posible acción sinérgica sobre la inhibición de la síntesis de hormona tiroidea.
    • Metildopa: potenciación de la toxicidad de litio, por posible disminución su eliminación renal y/o incremento de la captación cerebral de litio.
    • Metronidazol: potenciación de la nefrotoxicidad del litio. No se ha establecido el mecanismo.
    • Poliestirensulfonato sódico: disminución de los niveles plasmática de litio, con posible inhibición de su efecto, por reducción de su obsorción digestiva.
    • Sales de sodio: inhibición del efecto de litio, por posible competitividad a nivel de reabsorción tubular de ambos iones.
    • Sumatriptan: posible incremento de la neurotoxicidad.
    • Teofilina: disminución del efecto antimaníaco del litio, por posible incremento de su excreción renal.
    • Tetraciclina: disminución de la eliminación de litio, con posible potenciación de su acción y/o toxicidad. No se ha establecido el mecanismo.
    • Topiramato: se han descrito dos casos de sobredosis por litio en pacientes tratados con topiramato. Se aconseja monitorizar los niveles de litio.
    • Verapamilo/diltiazem: se ha comunicado algún caso de neurotoxicidad.
  • Precauciones y uso en situaciones especiales:
    • Precauciones:
    • Epilepsia: se han observado convulsiones durante la perapia con litio, generalmente debidas a sobredosis.
    • Deshidratación severa: puede potenciarse la toxicidad de litio en casos de pérdidas de líquido corporal , teniendo que ser necesarioun ajuste de la posología para evitar una acumulación sérica de litio.
    • Diabetes: se ha observado disminución de la tolerancia a la glucosa con riesgo de hiperglucemia.
    • Dietas restrictivas en sal, hiponatremia: puede aumentar el riesgo de toxicidad de litio, por disminución de su eliminación renal.
    • Enfermedad de Addisón: puede aumentar el riesgo de toxicidad de litio , por disminución de su eliminación renal.
    • Hipotiroidismo: puede inducir hipotiroidismo y bacio en pacientes predispuestos . Evita su uso en pacientes con hipotiroidismo no tratado.
    • Insuficiencia cardíaca y otras alteraciones cardíacas: El riesgo de toxicidad por litio es significativamente mayor en pacientes con alteraciones cardiovasculares graves o muy debilitados.
    • Insuficiencia renal: dado que se elimina mayoritariamente por vía renal, será necesario un ajuste de la posología de acuerdo al grado de funcionalismo renal.
    • Miastenia grave: puede producir debilidad muscular pudiendo agravarse la enfermedad.
    • Fibrosis quística: se ha observado reducción de la excreción renal del litio.
    • Terapia electroconvulsiva: interrumpir el litio al menos una semana antes de iniciar una terapia electroconvulsiva y no reanudar hasta pasados varios días de finalizar la terapia electroconvulsiva.
    • Situaciones especiales:
    • Embarazo: Categoría D de la FDA. El litio atraviesa la placenta , alcanzando concentraciones séricas fetales iguales a las maternas. El litio puede causar daño fetal cuando se administra a embarazadas. Diversos estudios sugieren un incremento de la incidencia de anomalías cardíacas, especialmente la anomalía de Ebstein. Otros defectos observados han sido: síndrome de Down, pies planos, meningomielocele, etc. La toxicidad por litio en el recién nacido incluye cianosis, hipotonía muscular, sangrado GI, cardiomegalia, bradicardia, depresión tiroidea, y diabetes insípida; la mayoria de estos efectos son autolimitados, resolviéndose en 1-2 semanas y se corresponden prolongación de la eliminación y elevación de la vida media en el neonato. El uso en este medicamento , especialmente durante el primer trimestre , sólo se acepta en caso de situaciones extremas o cuando otros fármacos no pueden ser utilizados o son ineficaces. Se recomienda monitorización estricta de los niveles séricos de litio y ajustes de dosis cuando se utliza este fármaco durante el embarazo ; el aclaramiento renal y la distribución se incrementan durante el embarazo , por lo que las embarazadas pueden tener concentraciones subterapéuticas del fármaco si la dosis no se incrementa adecuadamente , no obstante, inmediatamente antes del parto, los valores séricos pueden retornar a su nivel normal , por ello y también para reducir el riesgo de intoxicación postparto por litio, la dosis del fármaco debe reducirse 1 semana antes o al comienzo del parto. Se recomienda anticoncepción cuando se utiliza este medicamento en mujeres fértiles.
    • Lactancia: El litio es excretado con la leche materna, alcanzando unos niveles en leche del 40-50% de la concentración sérica materna. Aunque no se han observado efectos tóxicos en el lactante, se desconocen los efectos a largo término derivados de la exposición. Asimismo, hay posibilidad de toxicidad inducida por el litio en el lactante. Se recomienda suspender la lactancia materna o evitar la administración de este medicamento. Si se optase mantener la lactancia natural en pacientes tratadas con litio, se aconseja monitorización clínica del lactante. Se suspenderá la lactancia materna o el tratamiento de la madre en caso de infección o deshidratación del lactante.
    • Niños: La seguridad y eficacia del uso de carbonato de litio en niños menores de 12 años de edad no han sido establecidas. El litio puede disminuir la formación o densidad ósea en niños además de depositarse en los huesos sustituyendo al calcio en la hidroxiapatita. Uso no recomendado en niños menores de 12 años.
    • Ancianos: Los ancianos pueden presentar una disminución de la velocidad de aclaramiento renal y del volumen de distribución. Asimismo, el litio parece ser más tóxico para el SNC en ancianos, incluso a concentraciones séricas terapéuticas de litio. Los pacientes geriátricos también pueden ser más propensos a desarrollar bocio inducido por litio e hipotiroidismo clínico así como disquinesia. La sed excesiva y el mayor volumen de orina pueden ser los primeros efectos secundarios más frecuentes del litio en el anciano. Uso precautorio, recomendándose dosis menores y monitorización más frecuente.
    • Efectos sobre la conducción: Puede alterar la capacidad de concentración y los reflejos, lo que debe ser tenido en cuenta en pacientes que vayan a conducir o manejar maquinaria peligrosa.
  • Efectos secundarios o reacciones adversas: Los efectos adversos de carbonato de litio son, en general, frecuentes y moderadamente importantes.
    • Cardiovasculares: Aplanamiento de la onda T del ECG, disfunción del nodo sinusal. Se han observado edemas en las extremidades.
    • Piel: Erupciones exantematicas, acné, erupciones psoriasiformes o empeoramiento de la psoriasis, alopecia moderada , sequedad y debilidad capilar.
    • Endocrino: Hipotiroidismo (3-35%) con disminución de T3 y T4 y elevación de la recaptación de yodo radiactivo, bocio (4-12%). El hipertiroidismo aunque puede observarse, suele ser muy raro y los síntomas aparecen después de varios años de tratamiento.
    • Gastrointestinal: Náuseas, estreñimiento o diarrea. Con menor frecuencia , sequedad de boca, dolor epigástrico, dolor abdominal, flatulencia.
    • Hematológico: Excepcionalmente, leucocitosis, elevación del recuento de neutrofilos.
    • Renal: Empeoramiento de la función renal, disminución de la capacidad de concentración renal (15-30%) , poliuria (30-50%). Diabetes insípida nefrógena.
    • Metabólico: Aumento de peso (11-33%). También produce una alteración del metabolismo hidrocarbonado, con intolerancia a glucosa, hiperglucemia transitoria. El hipertiroidismo es raro, así como la descalcificación de grado leve.
    • Musculo-esquelético: Miastenia. La miopatía hipopotsémia puede ser una complicación del tratamiento con litio.
    • Sistema nervioso: temblor fino de manos (33-65%), descordinación psicomotriz , miastenia, rigidez en rueda dentaria (48-59%), cambios inespecificos del EEG, empeoramiento cognitivo y pérdida de memoria, confusiones.
    • Oculares: Transtornos de la acomodación ocular más frecuente en jovenes. Con menor frecuencia visión borrosa.
    • Generales: Es frecuente la polidipsia al inicio del tratamiento, así como malestar general.
    • Raramente: Confusiones, disfasia, mioclonía de los miembros completos, coreoatetosis, incontinencia urinaria, disartria, miotonia e hiperreflexia.
  • Condiciones especiales de conservación: Conservar en un lugar seco y fresco.
  • Nombre comercial:
    • plenur.jpgPlenur
      • 400 mg 100 Comp. Lib. Sostenida. R
  • Condiciones de dispensación: Con receta médica.