• Mecanismo de acción: Sus acciones están mediadas por la activación de subtipos específicos de receptores tipo A del GABA, facilitando la transmisión inhibidora GABA. Modulan el complejo que permite una mayor afinidad del GAB por su receptores originando una mayor apertura del canal de iones CI-favoreciendo el ingreso de iones de cloro a la célula, que genera hiperpolarización y así disminuye la excitabilidad neuronal
  • Efecto farmacológico: Hipnótico y sedante.
  • Indicaciones terapéuticas:
    • Insomnio: tratamiento a corto plazo del insomnio, especialmente en pacientes que se despiertan excesivamente temprano por las mañanas o que tienen problemas de sueño asociados con ansiedad o como resultado de una enfermedad crónica.
  • Contraindicaciones:
    • Alergia a benzodiazepinas.
    • Miastenia grave: la actividad relajante muscular de las benzodiazepinas puede producir un empeoramiento de la enfermedad, con aumento de la fatiga muscular.
    • Insuficiencia respiratoria severa: su efecto relajante muscular puede potenciar la depresión respiratoria.
    • Apnea del sueño: puede producirse una exacerbación.
    • Insuficiencia hepática: severa, debido al riesgo asociado de encefalopatía.
    • Intoxicación etílica aguda, coma o síncope: debido a la depresión aditiva sobre el sistema nervioso central.
  • Interacción con otros medicamentos o alimentos:
    • Alcohol etílico: hay estudios en el que se ha registrado potenciación de los efectos depresores sobre el sistema nervioso central.
    • Anticonceptivos orales (estrógenos): hay estudios con otras benzodiazepinas ( clordiazepóxido, diazepam, lorazepam) en los que se ha registrado aumento de los niveles plasmáticos de la benzodiazepinas, con posible potenciación de su acción y/o toxicidad, por posible inhibición de su metabolismo hepático.
    • Cimetidina: hay algún estudio en el que se ha registrado aumento en el área bajo la curva y en la semivida plasmática de flurazepam, con posible potenciación de su acción y/o toxicidad, por inhibición de su metabolismo hepático.
    • Clozapina: hay algún estudio en el que se ha registrado potenciación de la toxicidad con aparición de delirio, fiebre o colapso. No se ha establecido el mecanismo.
    • Disulfiramo: hay algún estudio con otras benzodiazepinas (clordiazepóxido, diazepam) en el que se ha registrado disminución del aclaramiento y aumento de la semivida plasmática de benzodiazepina, con posible potenciación de su acción y/o toxicidad, por posible inhibición de su metabolismo.
    • Levodopa: hay estudios con otras benzodiazepinas (clordiazepóxido, diazepam, nitrazepam) en los que se ha registrado inhibición del efecto antiparkinsoniano, por antagonismo de sus mecanismos colinérgicos y dopaminérgicos.
    • Omeprazol: hay algún estudio en el que se ha registrado potenciación de la toxicidad de flurazepam, con alteraciones psicomotrices, por posible inhibición de su metabolismo hepático.
  • Precauciones y uso en situaciones especiales:
    • Precauciones:
    • Insuficiencia respiratoria, enfermedad pulmonar obstructiva crónica: El uso de benzodiazepinas puede potencialmente conducir a depresión respiratoria. En insuficiencia respiratoria leve o moderada se deberá reducir la dosis.
    • Insuficiencia hepática: Reducir la dosis en insuficiencia hepática. Al igual que con todas las benzodiazepinas, puede empeorar la encefalopatía hepática. Usar con precaución en pacientes con insuficiencia hepática grave y/o encefalopatía. Reducir la dosis.
    • Historial de drogodependencia: El uso prolongado o dosis elevadas de benzodiazepinas puede producir dependencia psíquica o física.
    • Insuficiencia renal: Se aconseja comenzar con dosis más bajas.
    • Porfiria: Su metabolización hepática puede potenciar la síntesis de determinadas enzimas como la ALA sintetasa, que puede dar lugar a aumento de porfirinas, lo que provoca la exacerbación de la enfermedad.
    • Tolerancia: El uso continuado (varias semanas) puede haber pérdida de eficacia.
    • Dependencia: Puede provocar dependencia física y psíquica. El riesgo aumenta con la dosis, duración de tratamiento y en pacientes con antecedentes de consumo de drogas de abuso o alcohol y pacientes con alteraciones importantes de la personalidad. Una vez que se ha desarrollado la dependencia física, la finalización brusca del tratamiento puede acompañarse de síntomas de retirada, tales como cefaleas, dolores musculares, ansiedad acusada, tensión, intranquilidad, confusión e irritabilidad. En casos graves, despersonalización, hiperacusia, hormigueo y calambres en las extremidades, intolerancia a la luz, sonidos y contacto físico, alucinaciones o convulsiones.
    • Insomnio de rebote y ansiedad: Se ha descrito un síndrome transitorio tras la retirada del tratamiento, caracterizado por la reaparición de los síntomas. El riesgo es mayor después de finalizar el tratamiento bruscamente. Al utilizar las benzodiazepinas de acción corta en ciertas indicaciones puede suceder que el cuadro de retirada se manifieste con niveles plasmáticos terapéuticos, especialmente si la dosis utilizada era alta.
    • Amnesia: Las benzodiazepinas pueden inducir una amnesia anterógrada. Este hecho ocurre más frecuentemente transcurridas varias horas tras la administración del medicamento, por lo que, para disminuir el riesgo asociado, los pacientes deberían asegurarse de que van a poder dormir de forma ininterrumpida durante 7-8 horas.
    • Reacciones psiquiátricas y paradójicas: Las benzodiazepinas pueden producir reacciones tales como, intranquilidad, agitación, irritabilidad, agresividad, delirios, ataques de ira, pesadillas, alucinaciones, psicosis, comportamiento inadecuado y otros efectos adversos sobre la conducta. En caso de que esto ocurriera, se deberá suspender el tratamiento. Estas reacciones son más frecuentes en niños y ancianos.
    • Psicosis: Las benzodiazepinas no están recomendadas para el tratamiento de primera línea de la enfermedad spicótica.
    • Ansiedad asociada a depresión: Las benzodiazepinas no deben usarse solas para el tratamiento de la ansiedad asociada a depresión, se han observado episodios de manía e hipomanía con riesgo de suicidio.
    • Glaucoma en ángulo estrecho: El posible efecto anticolinérgico de la benzodiazepina puede aumentar la presión intraocular y agravar la enfermedad.
    • Situaciones especiales:
    • Embarazo: Categoría X de la FDA. Los estudios sobre ratas y conejos no han registrado efectos teratógenos u otros efectos adversos o postnatales. El flurazepam atraviesa la placenta. No se han realizado estudios adecuados y bien controlados en humanos. No se han registrado efectos de anomalías congénitas atribuibles al flurazepam. Algunos estudios han sugerido un riesgo incrementado de malformaciones congénitas con el uso de benzodiazepinas (clordiazepóxido, diazepam) durante el 1er trimestre. Se han atribuido síndrome de abstinencia neonatal (temblores e irritabilidad) así como flaccidez neonatal y problemas respiratorios con el uso crónico de benzodiazepinas durante el embarazo (incluyendo flurazepam). El uso de benzodiazepinas justo antes o durante el parto puede dar lugar a un síndrome en el neonato caracterizado por hipotonía, letargia y dificultades en la lactación. Aunque no parece que el uso ocasional y con dosis moderadas comporte riesgos especiales, rara vez es urgente el uso de benzodiazepinas durante el embarazo, en especial el de las indicadas sólo como hipnóticas como es el caso de flurazepam. En este caso, el riesgo potencial embriotóxico y/o teratógeno supera claramente el teórico beneficio terapéutico por lo el uso de flurazepam esta contraindicado en embarazadas.
    • Lactancia: Se ignora si el flurazepam se excreta con la leche materna, no obstante, la mayoría de las benzodiazepinas sí se excreta. Los neonatos metabolizan más lentamente las benzodiazepinas, por lo que es posible la acumulación de estos fármacos y sus metabolitos alcanzando niveles tóxicos (sedación, dificultades en la alimentación y pérdida de peso). Se recomienda suspender la lactancia materna o evitar la administración de este medicamento.
    • Niños: La seguridad y eficacia del uso de flurazepam en niños no han sido establecidas. Uso no recomendado en niños. Observar a los niños cuyas madres hayan tomado flurazepam durante el embarazo. Los neonatos más susceptibles a flurazepam debido a que lo metabolizan más lentamente, con riesgo de toxicidad.
    • Ancianos: Los paciente geriátricos pueden mostrar sensibilidad a los efectos adversos de las benzodiazepinas sobre el SNC. Un estudio retrospectivo de control de casos ha mostrado que los ancianos en tratamiento con benzodiazepinas de acción prolongada tienen mayor propensión a sufrir caídas y fracturas que aquellos en tratamiento con benzodiazepinas de acción corta. Se recomienda limitar la dosificación a la mínima eficaz y aumentarla gradualmente, si es necesario, para disminuir la posibilidad de desarrollo de ataxia, mareos y sedación excesiva.
  • Efectos secundarios y reacciones adversas:
    • Conducción: Las benzodiazepinas tienden a producir disminución de los reflejos, pequeñas alteraciones de la coordinación psicomotriz y del estado de alerta. Flurazepam con cierta frecuencia produce sedación residual al día siguiente. Por tanto, los pacientes tratados con este fármaco debería evitar en lo posible la conducción de vehículos o el manejo de maquinaria compleja especialmente durante las primeras horas de la mañana. No tome bebidas alcohólicas.
    • Reacciones adversas:
    • El perfil toxicológico es similar al del resto benzodiazepinas. Las RAM en la mayor parte de los casos, afectan principalmente al sistema nervioso central.
    • Sistema nervioso: (>10%): sedación, somnolencia. (1-10%): ataxia, confusión (especialmente en ancianos y debilitados), depresión, desenmascaramiento de depresión, mareos. (0.1-1%): reducción de la líbido, impotencia sexual, disminución de orgasmos. (<0.01%): extrapiramidales, síntomas, temblor, vértigo, habla pastosa, cefalea, convulsiones (crisis); amnesia anterógrada ( el riesgo se incrementa con la dosis), puede asociarse a conductas inadecuadas, desinhibición, euforia, coma; ideas e intentos de suicidio. Reacciones paradójicas como ansiedad, agitación, excitación, hostilidad, agresividad, furia, alteraciones del sueño/insomnio, aumento de la líbido y alucinaciones, pesadillas, psicosis, comportamiento inadecuado y otras alteraciones de la conducta. Dichas reacciones pueden ser severas y aparecen más frecuentemente en niños y ancianos. En caso de producirse, el fármaco debe ser discontinuado.
    • Ototoxicidad: tinnitus.
    • Respiratorios: (>0.01%): insuficiencia respiratoria, apnea, empeoramiento de la apnea del sueño (dosis dependiente): Empeoramiento de la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC).
    • Generales: (1-10%): astenia, miastenia. También se ha observado hipotermia, sabor amargo y sabor metálico.
    • Piel/Hipersensibilidad: (<0.01%):erupciones exantematicas, exceso de sudoración. Anafilaxia.
    • Gastrointestinales: (0,01%): náuseas. (<0.01%): estreñimiento.
    • Sangre: (<0.01%): leucopenia, agranulocitosis.
    • Oculares: Rara vez, diplopia y visión borrosa.
    • Hepatobiliares: Descritos casos aislados, dolor precordial.
    • Cardiovasculares: Rara vez, palpitaciones, dolor precordial.
    • Laboratorio: Aumento de transaminasas (ALT y AST), fosfatasa alcalina y bilirrubina.
  • Condiciones especiales de conservación: Conservar en un lugar fresco y seco.
  • Nombre comercial:flurazepam.jpg
    • Dormodor
      • 30 mg 30 capsulas P
  • Condiciones de dispensación:
    • Medicamentos con sustancias psicotrópicas.
    • Un solo medicamento por receta.
    • Un solo envase por receta.
    • Anotar el DNI de la persona que la retira en el dorso de la receta.
    • Anotación en el libro recetario.
    • Conservar la receta durante dos años, si no es facturable.
    • Anotación en el libro oficial de contabilidad es estupefaciente psicótropas utilizadas en la preparación de fórmulas magistrales.